viernes, 25 de febrero de 2011

Sueños húmedos


Quisiera no bajar nunca de este colectivo,
Explorar nuevos horizontes, descubrir nuevos caminos...
Mientras viajo se desata una tormenta y observo;
Casi como una costumbre, o como un rito,
Una cruel y fría escenografía...
Una vieja abre su paraguas en cada esquina,
Esperando aquello que no quiere,
Deseando lo no deseado.

Afuera la lluvia comienza
y aquí la gente parece no inmutarse...
Cada quien en su mundo,
Ignorando lo que sucede fuera del transporte...
Fuera de su mundo encapsulado en un gran mundo.


Mi viaje está llegando a su fin,
Quisiera no bajar nunca de este colectivo,
Quisiera seguir de largo, hacia un nuevo destino,
Donde los sueños no se empañen con esta lluvia tan fácilmente,
Donde NO PODER sean 2 palabras posibles y no una costumbre.

Deseo tantas cosas que mis sueños se vuelven húmedos,
Pocos definidos...y al final termino optando
Por ser 1 más del montón,
1 más de esta coreografía de monigotes mecánicos.

Quisiera no bajar nunca de este colectivo,
Pero también quisiera nunca haber subido...

A medida


Pintaste mi piel con tus besos,
Moldeaste, con tus manos, mi ser.
Tus palabras fueron bellos acordes entre tanto silencio;
Y tu interminable energía fue mis pies.

Pinchaste mis penas como pompas de jabón,
Y me llenaste todo el cuerpo de alegría, de vos.
Tu ojos fueron sueños,
Mi libertad fue tu razón.

Mi elixir de la vida fue verte cada día,
Y un “te amo” de tus labios, hizo latir mi corazón.

Posesión


Contando los pasos, que se vuelven más pesados a cada instante; me recuesto en mi cama para dejarme llevar. 
Tal vez Morfeo se apiade hoy de mí, y después de tanto tiempo, me ayude a soñar.
Tomo ese libro que comencé a leer esta última semana, y noto que no me agrada, pero ¿Qué más da?
A mi alrededor todo duerme, hasta mi felicidad. Pero mi corazón está bien despierto, palpitando vitalidad.
La nostalgia acaricia mi cuerpo, pero no me dejo seducir; la noche penetra profundo y este libro no tiene fin.
Lo cierro bruscamente, mi paciencia se entregó.
Puede ser que encuentre algo para ver en el televisor.
Como mi humor, el artefacto hace zapping: drama, comedia y amor.
Una serie de niños prodigio, no es una buena elección.
La nostalgia me besa, me roza; y cuando me estoy por rendir…tomo un cuaderno y un bolígrafo y comienzo a escribir.
Es mi mundo, soy omnisciente. Puedo volar.
Soy un dios, siento, suspiro y escribo…pero con una diferencia,
Yo soy real.